La comida italiana está en Polonia (Pierogi)

¿La pasta es italiana o polaca? Bueno, no vamos a quitarle su reinado al país de la bota, pero también les diré que en mi viaje a Polonia descubrí un hermoso plato típico parecido al ravioli, pero más fuerte para soportar las temperaturas del país del este de la Europa. Los pierogi, nos dicen Wikipedias, tienen su origen muy difuso en los países de Europa central o este de Europa; son muchos los países de esta área que claman por la originalidad de su invención, como Polonia, Rusia, Lituania y Ucrania.

Bien, pues lo conocí gracias a mi querida amiga Yalgonata, que ayer me recordó en un llamado por Skype y he decidido hacer esta receta en su honor.




INGREDIENTES

  • 600 gramos de queso de conserva en refrigerador (queso fresco).
  • Papas como 800 gramos.
  • Aceite de oliva.
  • Champiñones en juliana.
  • 1 cebolla hermosa.
  • 1 taza de café de nata rancia.
  • Sal y pimienta
  • Harina refinada de trigo 1 kilogramo.
  • Medio litro de agua.
  • 2 o 3 huevos de gallina.
  • manteca.

PROCESO

Desmigar el queso y cortar en cachos las papas, todo junto meterlo en una picadora y convertir en cachos muy pequeños. 

Por otro lado, encender una sartén con aceite para sofréir los champiñones y la cebolla picada hasta punto de dorado o pochado. Una vez hecho, retíra del fuego y del aceite y mezcla con queso, papas y la nata rancia. Esto dejálo enfriar en la encimera.

Haremos la pasta que envuelve la mezcla. Entonces, poné la harina sobre la encimera, haz un volcán y entonces abre los huevos, la mantequilla y un pelín de agua calentada sin llevar a hervir. Toca amasar y añadir la harina si va haciendo falta. La pasta ha de ser suave, que no se pegue. 

Extendé la masa y ponla de un grosor de 4 milímetros. Ahora con un vaso le vas sacando circulitos, que serán estas empanas o ravioli. Pon ahora cada relleno en cada circulito y ciérralo. Puedes prensar las esquinas con un tenedor para darle una forma de empanada muy divertida. 

Ahora hierve la olla de agua, pon la pasta y déjala que suba. Cuando suba ya está. Riquísimo. 


¡BUEN PROVECHO!






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